Ayer estuvimos en la inaguración del festival Les nits de cinema oriental organizado en Vic y dedicado al cine asiático; aunque ya se habían hecho algunos actos dentro del festival, cómo una proyección fuera de concurso y la presentación de la exposición “Corea del nord el pes de la història”, tuvimos la presentación oficial como festival de cine y una premiere.

Cuando vayáis al festival no os esperéis algo muy glamuroso, lleno de estrellas de la gran pantalla, alfombras rojas, limusinas, etc. más bien es un festival familiar y amigable, con gente asidua y conocida, con un buen trato y muchas ganas de pasarlo bien.

El festival se organiza en distintos días de la semana, cada uno de ellos con una temática especial y distintos actos referentes a esa misma temática, el día de la inaguración trataba sobre Tailandia y tuvimos la ocasión de ver dos películas de estreno y comer una cena típica.

Empezamos la tarde de manera un poco rara, justo cuando estábamos llegando a Vic nos cayó una tormenta de verano de esas que no te deja casi ni conducir, por suerte ya estábamos cerca del sitio y pudimos llegar. Un avez allí Quim Crusellas nos recibió estupendamente, una gran persona y excelente organizador del festival (os hablaremos de él más adelante).

Los pases eran en un edificio emblemático de Vic (El sucre), en un auditorio perfecto para la ocasión: con el tamaño justo y una inclinación perfecta para un visionado excelente desde cualquier sitio, la calidad de las cintas estupenda y los subtítulos en catalán en una de ellas, lo que demuestra un gran trabajo por parte de la organización para promover este tipo de cine en nuestro país. Pudimos ver Yamada: the samurai of Ayothaya y Raging Phoenix, dos películas tailandesas de artes marciales cada una con su especial atractivo.

Entre las dos películas tuvimos una cena típica tailandesa, que por desgracia y a causa del mal tiempo no pudimos hacer en el exterior cómo estaba pensado, pero que la organización arregló de manera muy rápida trasladándola dentro del edificio, la cena constaba de 5 platos tradicionales y exquisitos, aunque algunos un poco extraños para nuestra cultura.

Al final fue una gran noche, pudimos disfrutar de cine del bueno, comer como reyes y cononcer a gente interesante, cómo Domingo del blog Made in China, todo un experto y fanático del cine oriental y por supuesto Quim, organizador del festival. Algo muy recomendable y con ganas de continuar el resto de la semana.