Hoy os traemos una gran recomendación de película asiática que podréis encontrar en Netflix, y esta vez sí que realmente os invitamos a ver esta película porque seguro que la disfrutaréis. Se trata de una de las películas de Bollywood que ya ha conseguido un nombre importante: Raees, básicamente por estar protagonizada por Shah Rukh Khan, con eso ya tiene una taquilla asegurada en su país; de todos modos, para todos los fans de este tipo de películas, aquí encontraréis una de las buenas y para los que no estén acostumbrados al cine de Bollywood más extremo, creemos que ésta puede ser una buena muestra para iniciarse.

La historia es bastante típica de este tipo de películas de Bollywood, aunque en esta ocasión el protagonista es el traficante y no el policía. En una zona de la India dónde el alcohol está prohibido, la mayoría se hacen de oro produciendo su propio alcohol casero y vendiéndolo, pero ese negocio se acaba pronto y así surgen los traficantes que importan clandestinamente licor de otros países; esta es la historia de un niño que creció sirviendo a estos traficantes y cuando ya se hizo mayor quiso tener su propio negocio; nadie se lo puso fácil, pero él es una persona muy espabilada y supo sortear todos los obstáculos, así como hacerse alguna alianza importante. Así pasan los años y su negocio de tráfico va prosperando y se va ganando (con sobornos) a toda la gente influyente; hasta encuentra al amor de su vida; hasta que cambia la jefatura de policía y un nuevo jefe intenta dar caza a todos los traficantes de la zona. No será nada fácil porque todos tienen sus influencias, incluso consigue que Raees se ponga en la política y lo envíe en un destino alejado de él. De todos modos, todo se irá torciendo para Raees cuando no sólo quiera ganar dinero, sino que se preocupe por su pueblo y su gente.

Leyendo el argumento y conociendo a sus actores, todos pensaréis que es la típica película de Bollywood con policías y villanos, que está bien para divertirse, pero que no os aportará nada nuevo; pero no es así, aquí se le da una vuelta a las películas que hemos visto habitualmente, primero haciendo que el malo sea el protagonista de la película (un malo con un gran corazón y preocupado por el pueblo, eso sí) en vez de mirar siempre del lado de la ley y que los policías acaben triunfando; la segunda novedad es que no se trata de una película de acción corriente, sino que empieza típicamente, pero cada vez más se va convirtiendo en un drama, sobre todo a partir del intermisión, acabando de forma bastante triste.

Así que tendremos una primera parte muy típica de Bollywood, dónde se explica una historia simpática y dónde podremos ver absolutamente de todo, con un ritmo que no para de crecer y una historia que quizás no sea la más original del mundo, pero que nos va enganchando (sobretodo por su protagonista), pero en una segunda parte se desvela su carácter más humanitario, se pierde todo el gamberrismo y toda la picaresca cuando el protagonista adquiere bastante poder en la sociedad y tiene que asumir sus responsabilidades como dirigente moral, y aquí es cuando el drama hace su entrada y a parte de perder cualquier ritmo que pudiera tener la película, cambia de tercio radicalmente y nos deja un poco de bajón (aunque sigue siendo interesante y entretenida).

De todos modos, no os preocupéis, porque aquí no os faltará nada de lo que esperáis cuando vais a ver una película de Shah Rukh Khan: un montón de canciones y bailes, acción a raudales (esta vez sin exagerarla demasiado), mucho humor y sobre todo un protagonista guapo, listo, ocurrente, algo malote, bueno… es decir, un hombre perfecto. Es decir, que volvemos a tener un Bollywood de esos muy comerciales, para que todo el país vaya al cine en tropel y disfrute de la película como enanos mientras bailan, comen, cantan chillan…

Por supuesto, la baza principal de esta película es su protagonista Shah Rukh Khan (Don, Happy new year) esta vez con gafas para parecer un poco más serio, y sin el cual la película habría sido una más para el olvido; pero gracias a él se ha convertido en todo un taquillazo; en cuanto a su protagonista femenina Mahira Khan, nos es algo desconocida y no es el típico bellezón de l India, incluso tiene un papel más secundario de lo normal en la película, pero mejora en la parte de drama. Y como villano, un actor de lujo Nawazuddin Siddiqui (Gangs of Waissepur, Psycho Raman).

En definitiva, otra película de Bollywood a lo grande, con un protagonista perfecto y ultra carismático, con todos los bailes y acción que podáis esperar, pero con un final algo dramático al que no estamos acostumbrados.

• Lo mejor de la película:

Ofrece todo lo que esperábamos de ella.

• Lo peor de la película:

El personaje del policía no nos ha convencido nada.