T-O-R Mirai ninja, un original universo de samurais y robots

Mirai ninja

Hoy os traemos otro número de la colección Trash-o-rama, nuestra colección de películas asiáticas extremas favorita, no es una novedad, pero es algo que nos quedó pendiente y que caza bien con la otra película que tenemos para esta semana. El Blu ray completo se llama Keita Amemiya greatest hits y que nos presentó algunas de las películas tokusatsu cyberpunk más oscuras y bizarras que hemos visto. Algunas de ellas ya las teníais reseñadas en nuestro blog, es el caso de Zeiram o Mechanical Violator Hakaider; pero nos quedaba una película por reseñar: Cyber ninja (Mirai ninja), para los que ya conozcan al director, otra de sus magníficas obras, esta vez quizás no tan oscura pero magistralmente bizarra. La película en realidad está basada en un videojuego de Nintendo del mismo nombre, pero también tiene mucho de Star Wars.

Mirai ninja
Grandes batallas

Mirai ninja nos sitúa en un universo dónde los samuráis están en guerra contra un ejército de soldados robots. Los robots, además de su fuerza y sus armas, tienen algunas fortalezas móviles con las que pueden realizar ataques devastadores, pero lo más importante es el rapto de la princesa de los humanos para poder ofrecerla como sacrificio y así ser capaces de invocar al gran señor cybernético. Los humanos reúnen a un grupo reducido de luchadores con un ki muy alto, y ellos se dirigen a la fortaleza enemiga a rescatar a la princesa, mientras el resto del ejército prepara un arma definitiva que podrá acabar con la fortaleza principal de los robots de un solo disparo. Entre los muchos enemigo y dificultades, los samuráis se encuentran con un aliado inesperado, un cyber ninja que también quiere destruir al ejército malvado (y que después resultará ser un viejo conocido). Todos juntos deberán acabar no sólo con las trampas y los ninjas, sino también con los generales del ejército enemigo, unos robots super capacitados para la lucha.

En realidad el argumento y suponemos que también el del juego), es casi igual al del episodio 4 de Star Wars, una princesa es secuestrada por el imperio maligno, un grupo reducido y sobre todo un joven en teoría sin mucha experiencia, pero con un gran ki oculto van a rescatarla, un robot muy chungo parece un enemigo, pero al final resulta ser un valioso aliado… Pero en Star Wars intentaron hacer una space opera que fuera muy de aventuras y que acabara en un tono lo más épico posible, y aquí se opta por una auténtica producción tokusatsu con todo lo que ello implica, pero, sobre todo, creando un universo especialmente imaginativo que junta varios elementos de la cultura cinematográfica japonesa.

Mirai ninja
Villanos de latex

Para los amantes de lo bizarro, sólo os diremos que aquí podréis encontrar samuráis tradicionales, robots ninja, castillos japoneses que son auténticos Transformers, lectores de Ki como en Dragon Ball, luchas a katana y otras con láser y explosiones, malotes muy chungos, actos heroicos y mucho, mucho más.

Y para los amantes del tokusatsu, si ya conocéis los trabajos previos del director Keita Amemiya, ya sabréis un poco lo que vais a encontrar, para los que no, además de la bizarrada que representa un espectáculo como éste, le añadimos unos diseños de villanos y de cyber ninja bastante distintos a los típicos tokusatsu, mucho más orgánicos y oscuros, por supuesto puro látex, pero con alguna técnica exclusiva que los hacen mucho más dinámicos.

A todo esto, se trata de una película de muy corta duración, si empezamos casi toda la primera mitad contando la historia y poniendo a los personajes en situación, para la segunda mitad ya sólo nos queda la pura acción, con algún discurso chungo del jefe de los malotes, pero en general la película tiene un ritmo sin ningún momento de descanso, no decimos que sea una película frenética, ya sabéis que a veces el ritmo japonés es bastante pausado, pero sí que está repleta de acción, tanto de luchas, como de espadas, etc.

Por supuesto, nos encontramos delante de un tokusatsu de los ’80, y eso significa que muchos se alertarán por el bajo nivel de los efectos especiales comparado con todo lo que se hace hoy en día; pero también es verdad que, como siempre, para nosotros todos los efectos tradicionales lucen mucho mejor que muchos CGI actuales, y aquí tenemos mucho látex, muchos rayos de luces, mucha maqueta y muchos props artesanales; todo muy falso, pero muy típico de un tokusatsu de la mejor calidad.

En definitiva, no os decimos que si la comparáis con alguna película actual de ciencia ficción sea lo más, pero es que no se pueden comparar de ninguna manera; esta película esta destinada para un público muy especial, no se trata ni de un tokusatsu juvenil, lleno de color, chic@s guap@s y movimiento, ni de una película cutre de la que reírse, sino que es un tokustasu más oscuro y bizarro, para un público más adulto, ávido de acción y de historias originales.

  • Lo mejor de la película:

Una gran mezcla que ya le habría gustado a George Lucas

  • Lo peor de la película:

Esperar de allá algo sofisticado y épico.

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