Para seguir con el repaso de las películas de Femme fatales que queríamos hacer en el día de la mujer, para homenajear a todas aquellas mujeres poderosas, nos decidimos a cavar con otra película que tenía muy buena pinta: The avenging quartet; sin embargo nos quedamos algo decepcionados ya que ni el nombre ni el poster reflejan la realidad de la película. De todos modos tenemos una película de acción de Hong Kong bastante decente, con unas artes marciales interpretadas sobre todo por chicas que nos han convencido bastante, aunque el guión sea bastante pésimo.

La historia trata de una chica de China que viaja a Hong Kong en busca de un antiguo amante al que daba por desaparecido; allí encuentra problemas con algunos hombres, pero en seguida encuentra también una aliada que la ayudará poniendo mano dura dónde sea necesario. Juntas investigarán la situación para descubrir que el tipo está involucrado en el robo y la venta de una pintura antigua (que lleva mucho más de lo que parece) a una organización mafiosa. Detrás de esta pintura hay también dos mujeres, en principio de distintos bandos, pero que acabarán aliándose, que antes que pagar prefieren cogerla por las malas. Así que, una vez que nuestras dos protagonistas se encuentren con su amado (si, resulta que había sido amante de las dos) intentarán ayudarlo a salir del mundo del hampa para que pueda estar a salvo, pero no habrá otro remedio que liarse a palos con todo el mundo para hacerlo.

Y algo tan típico usado casi siempre como excusa para una película de artes marciales dónde lo único importante es la acción, no se llega a liar, pero sí que tenemos un desarrollo que se alarga mucho más de lo necesario entrando en la relación entre las dos protagonistas, todos los sentimientos de amor y preocupación de cada uno de los personajes, creando una historia demasiado importante para lo que en realidad debería ser o para lo que busca el público en este tipo de películas. Se nota que ésta fue realizada en los años ’90, porque en los ’80 no habría pasado nada así, todo habría ido directamente al grano y la acción habría sido de escándalo.

En esta ocasión, aunque tenemos alguna pequeña escena de acción durante el transcurso de la historia, no pasa nada importante hasta el final de la película, y no nos referimos a la segunda mitad, sino a los últimos 10 minutos, que es cuando en verdad se encuentran todos y se ven las caras en una lucha a ocho manos dentro de una chabola en llamas. Esta escena nos ha parecido genial, un final perfecto para una película de artes marciales, pena que el resto de la película no acompañe, tan difícil habría sido llenarla toda con este tipo de escenas y rellenar sólo lo mínimo con un poco de historia y además haciéndolo con una historia dura y desgarradora y no tan sentimental?

Cuando os decíamos que ni el título ni el poster de la película hacen justicia  lo que después veremos en ella, pues ya os imagináis, que uno espera una película en la que cuatro chicas enfrentadas lleguen a aliarse para atacar a todos los hombres que les hicieron daño de alguna manera, o incluso de un grupo de chicas duras que sepan cómo enfrentarse a los hombres y lo hagan con todo el que se cruza en su camino, pero supongo que esto ya estaba muy visto y el director quería hacer algo distinto.

Sin duda lo mejor de la película son sus cuatro protagonistas, todas ellas expertas en el cine de acción: Cynthia Khan (Yes madam), Moon Lee (Zu warriors, Iron angels) o Yukari Oshima (Iron angels, Riki oh) bastante desaprovechadas con todo lo que hemos visto que son capaces de hacer, sobretodo Yukari Oshima, que debe tener una presencia en pantalla de poco más de 5 minutos en toda la película.

En definitiva, lo que podría haber sido una buena película de artes marciales protagonizada por unas expertas de cuidado y simbolizando a cuatro mujeres repartiendo caña a los hombres, se queda en una aburrida historia que no importa a nadie, con un gran final, pero al que a muchos les costará llegar.

• Lo mejor de la película:

El poster nos había convencido muchísimo antes de verla.

• Lo peor de la película:

Todas esas escenas en las que no pasa nada, tan sólo recuerdan viejos tiempos y amores.