La leyenda fantasmal de Pee Mak

Pee Mak

Después de ver una película tailandesa que no era de artes marciales, hemos comprobado que nos daba precisamente lo que teníamos en mente. Pee Mak es una película que intenta mezclar los géneros de terror, comedia y romántico, tirando más hacia el humor, pero sin querer olvidar los otros; y con esto tenemos lo que ya os podéis imaginar de una película de este calibre: malos actores, un guión casi inexistente, unas bromas patéticas, una imagen bastante pobre… pero incluso así, en esta ocasión le hemos encontrado algo de encanto, que no significa que sea una buena película.

Pee Mak
Unos aires de terror

La historia empieza con cinco amigos que están en una guerra absurda, en el bando de los perdedores en el que les es imposible ganar de ninguna manera; por eso acaban huyendo hacia el pueblo de uno de ellos, dónde les espera su mujer y su hijo recién nacido. Cuando llegan allí lo ven todo un poco extraño, pero no se preocupan porque al menos están a salvo, pero al cabo de un tiempo, de ver la reacción de la gente del pueblo cuando les hablan de la mujer y de ver un cadáver sospechoso con la misma alianza que lleva ella enterrado en el bosque, empiezan a sospechar que ella murió y que ahora están delante de un fantasma. El marido no sabe nada de esto y los otros cuatro compañeros, muy asustados, no saben cómo decírselo, ni siquiera están seguros de que sea verdad, así que con su simplicidad y tontería provocarán situaciones disparatadas y alguna confusión hasta que lo puedan llegar a aclarar todo. Al final se sabrá quién es el fantasma y se intentará luchar contra él, pero los amigos no están capacitados para algo así.

La verdad es que la película en sí no tiene mucho, sí que tenemos una introducción (muy tonta) en el campo de batalla, que no tiene nada que ver con el resto, pero que nos hace ver las estupideces que tendremos durante todo el rato, y también un final romántico y algo decente; pero durante todo el resto, no tenemos más que chistes malos, golpes y caretos de los protagonistas en una sucesión de situaciones que no nos dicen absolutamente nada, como si no se hubiera escrito guión y unos cómicos de pacotilla estuvieran improvisando sobre un tema común, lo que nos hace pensar que esto no llega ni a considerarse una película entera.

Pee Mak
Pero demasiadas tonterías

Suponemos que para el público tailandés, esta habrá sido una buena película, con un poco de humor hecho sobre una de sus leyendas más terroríficas, ya que la historia se basa en una leyenda popular; con un grupo de cómicos conocidos y alabados en al televisión del país, se ve que los cuatro amigos lo son, y con una producción algo decente comparada con las películas de terror tailandesas que hemos podido ver. Pero para un público occidental, que ni conoce a los protagonistas, ni le va a hacer mucha gracia ese humor tan local y a la vez tan simple, y que quizás esperaba ver algo más de terror y ha acabado con unos efectos de sonido correctos, pero unos maquillajes muy infantiles y pobres… pues no creemos que sea una película que sea fácil de exportar por mucho éxito que haya tenido en su país.

Para nosotros, quizás el problema principal ha sido el de querer dar una ambientación terrorífica a una película que claramente es una comedia absurda, quizás la idea era buena, pero la ejecución ha quedado algo como quiero y no puedo, no provocando ningún tipo de terror a nadie y basando casi todas las bromas en cuatro tipos chillando y corriendo de un lado al otro, confundidos y sin decidirse por nada.

En cambio, la mejor baza del director ha sido sin duda todo el momento romántico del final, en el que la película no se arregla ni cobra sentido, pero se agradece una conclusión con alguna idea ya que no hemos tenido ni inicio, ni un desarrollo trabajado.

El director es Banjong Pisanthanakun, quien se considera un buen director de cine de terror en su país y que hatsa ha intervenido en la recopilación internacional The ABCs of death, suponemos que esta ha sido su primera (y quizás la última) incursión en la comedia.

En definitiva, una película bastante local que seguramente el público tailandés disfrutará mucho, pero que aquí, quizás por no entender su humor o quizás por falta de referencias, no nos ha convencido nada.

  • Lo mejor de la película:

Tenemos que confesar que con alguna broma sí que nos hemos reído.

  • Lo peor de la película:

La escena final del fantasma que intenta dar algo de miedo.

https://www.youtube.com/watch?v=B9xbj_UK1pc

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