Hoy volvemos a los estrenos de Netflix, sobre todo porque son cosas que todos podéis ver cuando queráis y porque si se promociona un poco y cada vez lo ve más gente, conseguiremos que cada vez sean más y mejores los estrenos de cine asiático en la plataforma (y porque es la única plataforma de pago que tenemos para iros contando…). La película que os proponemos hoy es Piratas: El último tesoro de la corona, la que viene a ser la secuela de la película coreana que ya os reseñamos en su momento The pirates, en este caso con un reparto y un director completamente distintos, con una historia que tiene poco que ver, sólo el periodo histórico y un gran barco pirata con una intrépida capitana. Pues lo dicho, que los que queráis verla, pero no hayáis visto la primera parte, no os preocupéis por nada, porque las dos son totalmente independientes, sólo aprovecha el tirón de algo que tuvo éxito en su momento.
La historia se sitúa justo en el final de la era Joseon y el principio de la era Goryeo en Corea, cuando la última dinastía ya había caído y había la esperanza de una nueva forma de vida; entonces unos soldados se llevan y esconden el tesoro del emperador, un tesoro que puede mantener todo un imperio y que no debe caer en malas manos. En esto que tenemos un grupo de piratas bastante patosos, liderados por una capitana intrépida, pero tampoco no demasiado lista, que se encuentran y acogen a un grupo de cuatro bandidos que parecen unos patanes, pero que en realidad son unos buenos soldados (entre ellos el mejor espadachín de Joseon); juntos atacarán un barco japonés y descubrirán un mapa que indica la posición del tesoro del emperador, pero no será tan fácil conseguirlo, el mapa les llevará a una serie de pistas que les harán navegar por los sitios más peligrosos de los mares del Pacífico, además de llevar en sus talones a un grupo de militares que pretenden levantar el Goryeo. Con todo esto pasarán mil aventuras que los llevarán al lugar del tesoro escondido.
Puede que sea una película de plataforma streaming, pero la verdad es que tiene todos los elementos y el presupuesto de una gran producción (incluso más que la primera parte, que fue estreno en cines), y es que con el éxito que están teniendo los contenidos coreanos en Netflix, es normal que cada vez inviertan más en ellos.
Si la tuviéramos que definir de manera simple para que os hagáis una idea de lo que os vais a encontrar, se trata en realidad de una película de aventuras llena de humor y con mucha acción (acción al estilo asiático), un poco parecido a la primera parte, pero acentuando muchísimo más la parte humorística y quizás dejando la parte de acción con el mismo nivelazo, pero con un poco menos de cantidad. En la publicidad se la compara con Piratas del Caribe, pero nada que ver, aquí hay mucho más humor y mucho más simplón, el hecho de que sean piratas es un poco más anecdótico, no se basa para nada en la vida de los piratas, sólo está allí para darle un contexto original y lo que cambia radicalmente son las aventuras, lejos de ser de fantasmas, soldados, etc. aquí tenemos grandes retos, un poco al estilo de los primeros episodios de One Piece (trombas marinas, columnas de fuego, rayos imparables, etc.), todo muy exagerado.
Sin duda, aunque dentro de las películas asiáticas de plataformas asiáticas que hemos visto últimamente, ésta tiene un buen presupuesto y una producción cuidada, algunas veces vemos rechinar un poco la parte de los efectos digitales, y es que quizás estamos ya muy acostumbrados a lo que nos enseña Hollywood, que gasta presupuestos millonarios sólo en esta parte; pero como ésta es una parte más y no el grueso de la película, no nos importa; aquí lo más importante son sus personajes, que tengan un buen carisma y sean todo o divertidos posible, y en esta última parte están bastante acertados los dos actores Kang Ha-neul y Han Hyo-joo, los dos más de televisión que de cine, pero sin ningún problema en hacer una película como ésta; además de algún secundario realmente gracioso.
En definitiva, una película tonta y divertida para pasar una buena tarde; no encontraréis nada nuevo ni nada realmente espectacular, pero sí mucha diversión, una historia de piratas asiáticos y alguna escena de acción que merece la pena.
- Lo mejor de la película:
Su protagonista masculino nos ha convencido bastante (como humorista).
- Lo peor de la película:
Si esperáis una auténtica película de piratas, ésta no lo es.