Ya tenemos en nuestras manos una nueva entrega de Trash-o-rama, nuestra colección favorita de cine asiático cutre y bizarro, y esta vez viene con live actions, pero no una sesión doble como nos tiene acostumbrados, este mes hay sesión triple!!! Vaya sorpresón!
El tema elegido para esta edición tan especial es live action movies del videojuego clásico Street fighter, quizás el más jugado en toda la historia, pero no nos detenemos aquí, una de estas películas puede ser considerada el live action definitivo de todas las películas asiáticas, mezclando personajes de distintas partes en una trama imposible.
La primera de las películas que podemos ver es Future cops, una producción de Hong Kong de lo más loca. La historia empieza en el futuro, dónde los personajes de Street fighter están divididos en malos (Bison, Ken, Sagat y Honda) y los policías (Ryu, Vega, Dhalshim y Guile); Bison está a punto de ser juzgado y ejecutado, por lo que pide a sus esbirros que vayan al pasado a asesinar al juez, pero los policías los siguen y van a parar a un instituto dónde Nobita vive enamorado de Gisuka y aterrorizado por Suneo, cómo no encuentran el nombre del juez (Son Goku) deciden pedir ayuda a Nobita a cambio de protegerle y hacerle más popular. Mientras van buscando, se van implicando con la gente del instituto y cada vez están mejor, hasta que llegan los malvados intentando acabar con ellos y encontrar al juez. Debido a una nueva boda de su madre y nuevos nombre y apellidos, Nobita debe cambiar su nombre a Son Goku, por lo que ya la tenemos liada; los policías dan cápsulas de poder a la hermana y madre de Nobita, que se convierten en Chun Lis, al tío que se convierte en Blanka (el peor Blanka de la historia) y a Nobita que se convierte en Son Goku (el de verdad), así entre todos podrán luchar contra los malvados y Bison y vencerles.
Ya veis que lo que puede parecer un cutre live action de una videojuego, con bajo presupuesto, más de humor que de acción y unos efectos especiales dignos de principios de los ’80, es en realidad una mezcla de live actions (Street fighter, Doraemon, Dragon ball) que hicieron en Hong Kong de lo más visto en Japón en ese momento, además de ser el primer live action oficial del videojuego (si no tenemos en cuenta los cameos en City Hunter de Jackie Chan).
Toda la película es una auténtica farsa, más pensada como burla que como homenaje, con un humor muy físico y unos chistes muy fáciles y estúpidos; en realidad sobre la vida en un instituto y metiendo algunas peleas en medio, con unos personajes muy ridículos y poco parecidos con los originales y unas situaciones locas e infantiles. Pero como siempre, para los fans del cine cutre, ya sabéis que al menos con ella no podréis dejar de reír, sin ningún descanso entre medio.
Y sabed que, por muy cutre que nos pueda parecer, se eligieron para ella unos actores excepcionales (lo que no sabemos es como accedieron a aparecer, pero es normal ya que en ese momento no eran tan conocidos y la comedia hongkonguesa se llevaba mucho), y es que su protagonista es Andy Lau en el papel de Vega (aunque como Vega sólo va al principio y al final, durante toda la película no es más que un chulo guaperas intentándose ligar a una chica) y Simon Yam en el papel de Dhalshim (con una pinta espantosa y haciendo el ridículo todo el rato).
La segunda versión del videojuego viene en forma de película animada y es Korean Street fighter, la versión coreana no autorizada que intenta reproducir la historia del juego tal cual, con una sociedad después de la Tercera Guerra Mundial en la que un Bison de pacotilla va retando a distintos luchadores y los trae a su dimensión para vencerlos y obtener la energía necesaria para someter el mundo a las tinieblas. Los protagonistas serán un Ryu y un Ken aficionados a los videojuegos y enamorados de Chun Li, un Dhalshim mocoso que viaja con Blanka como mascota y un Guile que casi ni aparece.
La verdad es que se pasa una buena parte de la película presentando personajes, con imágenes del videojuego y dibujos estáticos mientras escribe en texto las características de cada uno; el resto del tiempo tenemos unos personajes bastante infantiles y unas animaciones pésimas (repitiendo muchos planos), pero al final la película tiene su gracia ya que vemos una vuelta inusual a los personajes que tanto hemos querido u odiado y que nos los hacen ver más ridículos que nunca.
Y hay un tercer live action, El último combate de Chun Li (Kung Fu Girl Feilling), y este es un AV en toda regla, con una Chun Li muy sexy y unos malvados demenciales (cada uno más ridículo que el anterior) y bastante asquerosos; la trama trata de Chun Li luchando contra distintos adversarios por su vida y la venganza y perdiendo su ropa y dignidad en ello; cuando es derrotada, el villano se la beneficia y la deja sin energía.
Como cualquier AV (previamente pixelado, por supuesto) tiene una acción o peleas de risa, sin ningún escenario a parte de un ring y ni siquiera diálogos, todo bastante aburrido para llegar a una única escena final de sexo larga y pesada con una chica que está bien, pero tampoco es nada del otro mundo…
De todas maneras siempre se agradecen estas sesiones que sólo podemos ver en nuestro país gracias a Trash-o-rama, y un poco de picante no le hace daño a nadie.
El DVD viene como siempre acompañado de algunos extras como el que quizás es el peor live action de la historia del cine (la versión coreana de Street fighter), un documental sobre el fenómeno y alguna cosilla más; todo ello muy completo.
Acabamos con un regalito de El último combate de Chun Li para el público masculino.