Esta semana estamos muy puestos con Asami y sus orígenes en el cine (fuera del AV más puro), y es que, esta musa del cine extremo japonés, después de salir del mundo del porno, siguió con sus andanzas, con algunas películas muy gamberras llenas de sexo, violencia y risas; justo por eso se hizo tan conocida entre el público ávido de películas de culto japonesas. Entre ellas, una de las primeras fue Terminator Zan kill, un exploitation de Terminator (ya lo suponíais, no) muy a la cine de Serie B japonés, al verdad es que nos hemos reído bastante con ella, no sé si era su intención, pero al menos así ha conseguido nuestra atención.
La película empieza en un futuro lejano en el que una corporación (en este caso no son robots) se ha adueñado del mundo, pero existe una pequeña resistencia (muy pequeña, de hecho, son 4 gatos) liderados por una médium que puede ver el pasado y predecir el futuro. En una de sus visiones, descubre quien es el científico que podría hacer un gran descubrimiento que salve a la humanidad del futuro, pero también lo sabe la corporación, así que manda un robot asesino para matarlo; a su vez, la resistencia usa todos sus poderes psíquicos para mandar a una guapísima ninja para salvar al científico. Resulta que el doctor tiene una ayudante idéntica a la ninja que le quiere salvar (una ayudante a la que se beneficia), así que al principio se crea un poco de confusión, pero cuando aparece el robot, mata a la ayudante e intenta matar a los dos protagonistas, todo queda más claro y no les queda más remedio que huir (con eróticos resultados…). Al final la ninja y el robot olvidarán un poco sus misiones para enfrentarse entre sí, dar un par de saltos en el tiempo sin ton ni son y llegar a un happy end.
Para que os hagáis la idea rápida, la película es la típica serie B japonesa de esas cutres y la mar de divertidas, que te ríes más de lo mal hecha que está, pero que también tiene algún momento divertido a posta; la única diferencia con el resto es que aquí se incluyen algunas escenas de sexo bastante picantes.
Por supuesto, el atractivo principal de la película es su protagonista Asami, que aquí hace un papel triple (aunque viene a ser el mismo personaje en diferentes momentos del tiempo), pero que interpreta a una ninja (la típica ninja con poca ropa y bien sexy) con algunas escenitas de sexo bien buenas y algunas de acción un poco más mediocres (pero siempre por culpa de sus oponentes, que ella, aunque no sea una gran experta en artes marciales, sabe moverse bien y simular que domina el tema). Por supuesto, poder ver a una de nuestras actrices extremas favoritas en uno de sus papeles de cuando aun era bastante joven y de cuando no era tan conocida y podía hacer papeles cutres y desatados, pues siempre es un plus.
Fuera de esto, pues tenemos la típica película con unos actores pésimos que dan las mismas ganas de reír que de llorar, los típicos escenarios que no son más que un almacén vacío y oscuro para que no se vea realmente dónde están (que casi siempre debe ser el mismo sitio), unas escenas de artes marciales horribles (comparadas con una película de género auténtica) y unos efectos especiales de lo más barato posible. Y con estos cuatro elementos se hace la típica película que todos habréis visto ya alguna vez y que puede parecer lo peor, pero con el tiempo te acabas acostumbrando y llegas a valorar otras cosas, como la pura diversión.
Y como bueno de la película, pues la idea general, de incluir viajes en el tiempo, ninjas, robots asesinos, corporaciones malvadas, científicos panolis, videntes, chicas sexys (en realidad sólo una haciendo todos los papeles femeninos de la película, pero ya nos vale); todo copiado de otras películas, aunque básicamente de Terminator, como indica el propio título. Pero este tipo de películas tiene un objetivo y es la pura rentabilidad, por pocos viejos verdes que la miren, siempre compensarán los recursos invertidos en ella, que son pocos teniendo en cuenta que la mitad son compartidos con otras producciones parecidas.
En definitiva, una película de lo más cutre, muy parecida a otras tantas de serie B japonesas; pero en esta ocasión tenemos a una Asami desatada pelando y teniendo sexo, lo que es un gran punto a favor. El resto, pues para echarse unas buenas risas si os va el cine cutre.
- Lo mejor de la película:
No nos cansamos de repetirlo: Asami en todo su esplendor.
- Lo peor de la película:
El científico panoli es de risa.