El otro día ya empezamos a comentaros las copias más cutres y absurdas de Batman que se habían hecho jamás, todas incluidas en un pack de Asian Trash Cinema llamado Batsploitation, dos DVDs que ahora sólo podréis encontrar como objeto de coleccionista y que, sin duda agrupan unas películas nunca vistas y de lo más bizarro posible. Hoy queremos hacer un pequeño repaso al segundo DVD del pack dónde, de nuevo, no todas las películas serán asiáticas, pero tampoco nos importa mucho. La verdad es que este pack da mucho juego, incluso para haceros unas sesiones largas e inolvidables, pero también para saltaros algunas de las películas que son infumables. De nuevo aquí se copia básicamente la versión de Adam West, pero hay referencias y burlas a muchas más películas.
La primera película de este DVD es Las locas aventuras de Batman y Robin, una comedia Filipina que se las trae… Los protagonistas son dos estudiantes muy fans de los cómics de Batman, uno de ellos se muere por Robin (en un sentido bastante homosexual) y el otro se acaba juntando con una banda de malhechores que deciden vestirse como el pingüino y el joker de los cómics para atracar algunos bancos y forrarse de dinero. Cuando el bueno con su hermano deciden estar del lado de la justicia y vestirse de Batman y Robin (con su batcoche, su batcueva y todo), lo hacen principalmente para ligar, pero en poco tiempo se darán cuenta de que tendrán que enfrentarse a la banda de malhechores, a quienes meterán en al cárcel un par de veces, y con quienes tendrán que volver a enfrentarse después de que éstos se fuguen a cada intento de retenerlos.
La verdad es que todas las películas filipinas de humor que vamos viendo nos parecen bastante iguales, con unos actores de pena interpretando a personajes ridículos, con bromas muy infantiles, un poco en el estilo de los programas infantiles mejicanos tipo El chavo del ocho.
La historia es casi inexistente en esta película, la verdad es que es sólo como un continuo de chistes tontos, gente haciendo el estúpido y hostias y trompazos de lo más absurdo posible, algo así como una improvisación humorística en la que hay que rellenar una hora y media y los actores no tienen muy claro cómo hacerlo. Eso sí, se complementa con algún número musical, alguna referencia a películas clásicas de superhéroes y suponemos que con personajes que localmente deben ser algo conocidos.
En definitiva, una auténtica aberración, puede hacer gracia al principio, pero para nosotros acaba siendo un poco pesada, funcionaría mejor como un mediometraje de menos de una hora.
La segunda de las películas es americana y algo más seria (o al menos lo intenta): El mundo salvaje de Batwoman nos cuenta las aventuras de un grupo de chicas guapas lideradas por Batwoman, una Madam con cosplay; es algo así como Los ángeles de Charlie, pero con muchas chicas, dónde cogen encargos (sobre todo del gobierno) de misiones complicadas. Aquí deberán impedir que unos malvados roben un aparato tecnológico que permite escuchar todas las conversaciones telefónicas, pero no saben que los malvados cuentan con un grupo de monstruos mutantes y una droga especial que desinhibe a las chicas haciéndolas bailar a lo loco.
Esta producción es muy de los ’70, con sus chicas monas en minifaldas o shorts, con sus bailes cachondos y sus malvados súper pérfidos, como sacados de un circo o un mal cómic. Toda la imagen está muy bien trabajada, pero sólo eso, la narración se hace muy aburrida y ni siquiera hemos tenido ganas de terminarla. No es una película bizarra y absurda como el resto del pack; ésta es una versión normalilla sin demasiado humor de ningún tipo.
La última película nos trae al Batman turco: Yarasa Adam Betmen (o más bien el James Bond turco), un detective que deberá acabar con una organización maléfica que pretende acabar con todas las chicas del mundo para que su líder pueda vender todas sus muñecas hinchables y forrarse de dinero. Batman y Robin irán en su coche de club de striptease en club de striptease siguiendo a las chicas más guapas y por casualidad se irán encontrando con los ataques a estas chicas, que pararán, pero no conseguirán descubrir quien es el líder de la malvada organización.
Esta película nos ha encantado, más que nada porque en esta edición trae unos subtítulos de la casa Asian Trash Cinema (con la característica firma de Domingo López), que convierten una aburrida película de detectives en una absurda trama de sexo y violencia, con unos diálogos divertidísimos. A parte de eso, ya os hemos contado que en realidad se trata más bien de una parodia de James Bond que una de Baman, con toda la banda sonora sacada de las películas del detective y mostrando una aventura propiamente de agentes secretos mujeriegos involucrados en muchos asuntos con mujeres sexys semi desnudas; tan sólo que algunas veces (no siempre, es algo muy al azar) cuando los dos detectives van a pegarse con los malvados, aparecen de golpe disfrazados de Batman y Robin (a su manera).
Bueno, que nos hemos reído como enanos con esta versión, y eso que parecía la peor de todas…