Hoy tenemos para todos vosotros la reseña de una novedad de cine coreano; se trata de una gran producción, pero no creemos que sea una de esas para recaudar lo máximo posible, si no habrían hecho algo más común. La película es The swordsman y podríamos decir que es el típico chanbara pero actualizado; ya sabemos que el chanbara es un género típicamente japonés y ésta es una película coreana, pero la verdad es que imita suficientes elementos de este género como para poder clasificarla dentro de él. Igualmente, no se trata de una película lenta y reflexiva como suelen ser las japonesas de época, sino que es una película de acción muy entretenida. 

Es la historia de un antiguo guardia real, pero cuando un nuevo líder emerge a base de traiciones y acaba con el actual rey, cambiando por completo el sistema político del país, nuestro protagonista acaba dañado en una batalla contra su mayor enemigo y pierde gran parte de su visión. Años más tarde vive como ermitaño en las montañas junto a una niña pequeña; de vez en cuando van a la ciudad para comerciar con sus productos y para ver si consiguen una cura para sus ojos; así que en uno de esos viajes descubren una reciente invasión (de momento más o menos pacífica) en la que los chinos están empezando a ocupar la ciudad, traficar y coger esclavos de ella. En un principio nuestro protagonista no se mete en el asunto, pero todo cambiará cuando la niña intente conseguir una medicina para él, entregándose como sirvienta de la hija de un noble, con tan mala suerte que justo entonces los chinos atacarán la casa del noble para conseguir más poder y cogerán a las dos niñas como rehenes. El antiguo samurái no dudará en coger su espada y dirigirse al escondite de los malvados para matarlos a todos y recuperar a la niña al precio que sea.  

La primera parte de la película nos cuenta toda la historia, empezando por el pasado del protagonista, lo que le condujo a la situación actual, su relación con la niña y su problema de salud; con alguna escena de acción aquí y allá, pero sin desfasar demasiado; no es una parte aburrida, aunque la historia sea bastante típica en este tipo de género, está contada con gracia, tiene suficientes elementos y el ritmo es bastante rápido, por lo que nos mantiene atentos para conocer todo lo que introduce a la segunda parte. Ya algo pasada la mitad del metraje, empieza la acción, que no para hasta el final, y aquí nos encontramos con un despiporre de luchas a katana, muy disfrutables por todos los amantes de la acción. 

Cómo sabemos que es lo que más os interesa, empezamos hablando de su acción, muy espectacular, con unas buenas luchas, nada realistas y que van de menos a más acabando con luchas uno contra uno de lo más épicas. Las coreografías no llegan a ser de lo mejor que hemos visto, pero están muy bien y con una dirección que las hace lucir mucho, así que no creemos que defrauden a nadie, solo tenéis que ver el trailer y os hacéis con la idea rápidamente. 

En cuanto a los personajes, son lo más típicos, muy basados en las películas japonesas; un ronin con un pasado enigmático, con un carácter muy cerrado y silencioso, pero que en el momento de la verdad saca lo mejor de sí y sorprende a todos los malos. Los malos, por supuesto son los chinos conquistadores, tienen aún más carisma, todos y cada uno de ellos muy bien diseñados, con armas distintas y apariencia pérfida, muy de videojuego en este aspecto. Por supuesto ninguno de ellos tiene un carácter definido ni unas motivaciones que nos creamos, pero tampoco lo necesitan, es una película de acción y eso es lo único que espera el espectador. 

Toda la imagen está muy bien trabajada, de nuevo se trata de fantasía, nada realista pero muy atractiva y con un buen presupuesto invertido sobre todo en escenarios y meter una buena cantidad de extras para darle un poco de vida a todos los espacios. 

Los actores no son muy conocidos, son los típicos artistas marciales no de primera categoría, pero muy válidos, que han aparecido en algunas películas sin destacar demasiado; cumplen perfectamente con su cometido y el aspecto que les han dado les pega mucho. 

En definitiva, no es una película seria ni realista, cosa buena muchas veces, sino que se trata de una buena película de acción y luchas a katana, muy entretenida y espectacular, los que vayáis a verla ya sabéis lo que os encontraréis: seguro que habéis visto de mejores, pero creemos que esta al menos os motivará. 

• Lo mejor de la película: 

Una imagen y una acción espectacular. 

• Lo peor de la película: 

La verdad es que como puro entretenimiento nos ha gustado bastante.