Como todos bien sabéis, la semana pasada tuvo lugar el Festival de Cinema de Sitges; por desgracia ya se ha terminado y no volveremos hasta dentro de 1 año, pero no os preocupéis, que ahora viene el turno de contaros todas las películas que vimos, que irán llegando a vuestro alcance durante este año, y así tenéis la recomendación de si podéis verlas o mejor no perder el tiempo (siempre bajo nuestro muy subjetivo punto de vista).

En las crónicas de este año no contaremos mucho más que las películas que vimos, ya que no hemos tenido tiempo para mucho más, ni hemos disfrutado completamente del festival por motivos familiares y laborales. Pero sí nos gustaría remarcar una cosa de lo que no éramos completamente conscientes hasta ahora, y es que realmente no nos habíamos dado cuenta de las dimensiones que está cogiendo el festival (seguramente porque antes asistíamos también entre semana y lo veíamos más vacío, ahora viendo los findes está casi imposible), y es que viendo todas las salas, en todas las sesiones completamente llenas, con unas entradas que se terminan al momento de salir a la venta (incluso en la preventa) y toda la gente que se queda sin ver lo que quería incluso con dos pases por película y 8 días de festival…

Pero vamos ahora a las películas que hemos visto, que no son pocas, en orden de visionado, empezando por el primer fin de semana de festival:

• Let it ghost: Una pequeña antología de tres historias sobre fantasmas hechas por un director novel de Hong Kong; la verdad es que las historias nos han recordado mucho a las películas de fantasmas de Hong Kong de los ’80, y lejos del género de terror, se decanta más por el humor, pero le falta ese encanto mágico de los ’80 y la dirección en general es bastante pobre. Para verla una vez por curiosidad y no repetir.
• Tokyo revengers. Part 2: Este live action de una serie manga tan famosa ya tuvo una primera parte en cine, que no nos convenció mucho; no sé i por expectativas o por evolución, esta segunda parte nos ha impresionado bastante más, con una historia mucho más trabajada, unas buenas escenas de acción de colegiales pegándose y en general, más centrada, sin tantos saltos temporales y un poco perdida como la primera parte.
• Onyx the fortuitous and the Talisman of souls (no asiática): Una comedia satánica bastante divertida (al menos para nosotros), con un humor tonto e infantil, pero un tema bastante cañero, con unos personajes muy molones y un protagonista típico de humor absurdo, una buena historia y un final de leyenda.
• Wake up (no asiática): de los directores de la aclamadísima Turbo kid, nos esperábamos algo muy cañero y original; la verdad es que la película no está nada mal, buena dirección, música, actores muy decentes… pero ni nos ha sorprendido, ni nos ha emocionado, un slasher muy corriente.
• Suitable flesh (no asiática): La decepción del festival; se nos anunció como una historia macabra basada en los mitos de Lovecraft, y la verdad es que la historia está bastante bien, pero esa dirección y ese tono de telefilm melodramático no le sienta nada bien; si está hecho a posta es una gran cagada (seguramente, porque este director ha hecho algunas cosas bastante decentes) y si no, vaya mierda de película.
• Project silence: Otra bonita decepción; lo que tenía que ser una película de acción con perros mutantes asesinos y el saber hacer de los coreanos, se convierte en una película de catástrofes un poco triste, con muy poca acción y no muy bien coordinada, con miles de agujeros de guion y sin demasiado interés en general. Nos ha aburrido bastante.
• The childe: Vamos a por otra coreana, en este caso un thriller de acción (nada de rollos psicológicos, de giros de guion inesperados, etc.) lo que, para una película coreana, la deja bastante desnuda; pero por suerte sí que cuenta con una historia original, unos personajes bien definidos y originales, una muy buena acción mezclada con un poco de humor; una propuesta muy movida, entretenida y bien hecha; ¡recomendada!
• El niño y la garza: Al oír que había una nueva película de Miyazaki y que la podríamos ver en el Auditori del Melià, creo que todos nos emocionamos bastante; pero no pensamos que el hombre ya está mayor y ya no es lo que era. La película está muy bien, técnicamente perfecta y con todo lo que pide un fan de Ghibli, pero le falta la magia, la gran historia y un personaje muy fuerte como en sus grandes éxitos. Un poco prescindible a nuestro parecer.