Hoy nos atrevemos con otra de esas películas realmente extremas que poca gente ve (no sabemos si es porque no gusta o porque les asusta). Pues hemos decidió ver y reseñaros Hellevator sin saber nada de ella; por su título nos pensábamos que nos encontraríamos con otra de esas películas de terror algo estúpidas, pero nos hemos llevado una grata sorpresa al ver un producto cyberpunk que, aunque sea de serie B con un presupuesto bajísimo, nos ha metido en un lugar inesperado.

La historia se sitúa en un Japón futuro dónde, sin saber lo que ha ocurrido, la humanidad vive debajo tierra, en unas instalaciones estructuradas por niveles (más de 200 niveles bajo tierra en total). Nuestra protagonista es una joven colegiala con algunos poderes telepáticos por los que puede conocer los pensamientos y las vidas pasadas de la gente, pero también muy destrozada por su propio pasado traumático. Para aliviar sus penas, ella recurre al tabaco de contrabando (en esa sociedad es una sustancia prohibida) y debido a eso tiene algunos problemas con la justicia, quien la persigue hasta que ella se esconde en uno de los elevadores que transportan a la gente entre los distintos niveles de la ciudad. En ese elevador van entrando y saliendo diferentes individuos muy peculiares, pero lo peor llega cuando unos policías tienen que llevar en él a dos criminales muy peligrosos que, por diversas circunstancias lograrán escapar y aterrorizar a todos los que se encuentran en el elevador en ese momento. Será entonces cuando alguien tenga que actuar para que no le pase nada a los civiles, pero allí cada uno tendrá un secreto distinto que sólo la chica podrá conocer gracias a sus poderes.

Si analizamos un poco sus tiempos, la película empieza con una imagen muy buena, sin enseñar casi nada, pero dando a entender perfectamente que se trata de una historia cyberpunk y algo bizarra (bueno, como todo el cyberpunk japonés); toda la primera parte con la entrada y salida de la gente y viendo los diferentes miembros de una sociedad muy extraña nos ha dejado con la boca abierta, todo muy bizarro; después de la explosión de intensidad que supone el escape de los presos, la película se frena un poco, convirtiéndose en algo mucho más… no normal, pero si previsible y monótono; pero no pasa nada porque ese momento sólo es la antesala que nos está preparando para un final como mínimo inesperado que quizás no nos deje de nuevo con la boca abierta, pero sí que nos hará ver que el haber visto la película completa no ha sido ninguna pérdida de tiempo.

El punto más fuerte de toda la película está sin duda en su imagen que, aunque esté hecha con un presupuesto ridículo, unos escenarios muy limitados, una fotografía algo sucia, etc. todo se adapta perfectamente para mostrar un futuro oscuro y sucio, en nuestra opinión bastante parecido al de la película Brazil (de la cual ha copiado muchos elementos) que nos sumerge completamente en algo a lo que no estamos acostumbrados y que a los verdaderos fans del género nos sorprenderá gratamente. Así tenemos una buena lección de que no se necesita mucho dinero para poder contar una buena historia, quizás algo simple y un poco desestructurada, pero muy adecuada a las sensaciones que se quieren transmitir y con un mensaje (no moralista) bastante potente.

A todo eso podéis añadirle algo de gore, una protagonista sin ninguna especie de diseño que la haga destacar, pero con mucha fuerza, una historia que se cuenta casi sin palabras, unos malotes a lo bestia, etc… o sea, muchos elementos que la convertirán sin duda en una buena muestra de cine asiático extremo.

Su director es Hiroki Yamaguchi (Bloody chainsaw girl), quien no nos había convencido con su otro trabajo, pero que ahora mismo comprobamos que tiene algunos títulos más con buena pinta que intentaremos recuperar, porque seguro que son muy interesantes.

En definitiva, la típica película que define perfectamente el género del cyberpunk japonés: bizarra, oscura, sucia, caótica… y muchas otras cosas que nos encantan ver. Quizás frene un poco su desconocimiento y bajo presupuesto, pero es algo a tener muy en cuenta.

• Lo mejor de la película:

Pocas veces tenemos un final original, éste consideramos que lo es bastante.

• Lo peor de la película:

Que no se hable más de productos como éste.