Cuando solemos pensar en películas de coches, lo primero que nos viene a la cabeza es la saga Fast and the furious, llena de tunnings, tíos macarras, tias buenas, música Hip Hop a todo trapo… Pues hoy os traemos una alternativa para la gente con un poco de mejor gusto, Motorway es una película de persecuciones de coches con todo el saber hacer y el estilo de acción propio de Hong Kong, pero también con una trama algo interesante y unos personajes bien trabajados, por lo que se puede diferenciar de lo que hayáis visto hasta ahora. Todo con el sello de calidad de haber sido producida por Johnnie To, que eso siemrpe invita a ver cualquier película.
La historia es bien sencilla, se trata de la típica pareja de policías, uno recién entrado al cuerpo con ganas de comerse el mundo y una gran pasión por los coches y la velocidad, y el otro ya más veterano, a punto de jubilarse y que ya lo ha visto y experimentado todo y ahora solo quiere algo de seguridad. Hay un delincuente que también es un apasionado por la velocidad y trama un plan de dejarse atrapar para preparar una fuga de la cárcel junto a uno de sus compañeros. Los dos policías lo descubren y se ponen a perseguirlo e intentar alcanzarle, sólo que el delincuente tiene mucha más experiencia con los coches y se escapa. El policía joven descubre que el otro ya había estado persiguiendo a ese criminal, por lo que acabó herido; pero lo convence para que le enseñe sus trucos y poder atraparlo en la próxima persecución.
Aunque estemos hablando de una película de acción, no creáis que se basa en persecuciones trepidantes, en primeros planos de cochazos a toda velocidad ni en virguerías increíbles, de hecho la mayor virguería de la película se basa en hacer un giro de 90 grados desde el coche parado, derrapando en muy poco espacio. Esta película trata más bien de cómo cada uno siente su amor por los coches, teniendo el policía joven una pasión extrema y usando su propio coche que ha construido pieza a pieza para evadirse de la realidad; el policía veterano un respeto necesario después de haber sufrido un buen accidente; y el malvado una extraordinaria pericia con la que disfruta, pero que le supone más un medio de trabajo que otra cosa.
Eso sí, en todo momento tenemos un ritmo que mezcla entre las relaciones entre la gente y las persecuciones propiamente dichas, pero lo hace de manera que no nos aburra, intercalando bien la historia de cada uno y los sentimientos que tienen dentro de la acción de una manera bastante normal, a la que ya estamos acostumbrados y no nos molesta lo más mínimo.
En cuanto al apartado técnico, podríamos decir que tiene algunos altibajos; mientras que las persecuciones de día son bastante buenas y utiliza algún elemento original como la cámara interior del coche de policía, en cuanto los coches entran en algún parking, o incluso la persecución final en las curvas y de noche, la cosa se estropea un poco, intentando ofrecer buenos planos, pero con una deficiente fotografía que hace que no disfrutemos de la acción como es debido y nos quedemos un poco a medias de los que estábamos esperando.
Los actores que interpretan los roles principales son, sin demostrar un nivel superior, adecuados para el trabajo, en el que tampoco es necesario tener ninguna perícia especial, ellos son Shawn Yue (Reign of assassins, y curiosamente Initial D, otra película de carreras de coches) y Anthony Wong (The four, Exiled) tan experimentado actor como policía en el personaje que interpreta, y quizás la única actuación de la película que podríamos remarcar.
El trabajo de dirección por Cheang Pu-Soi podríamos decir que también es correcto, muy bueno en algunas partes (como los cambios de ritmo), pero un poco flojo en otras (como la definición de los personajes).
En definitiva, que se trata de una película básicamente de persecuciones de coches, sin entrar en animaladas o llegar a la fantasía, intentando dar algo más que solo acción y un poco de verosimilitud, todo ello al estilo Hong Kong. Pero al final se queda en un producto más, que consideramos que no destaca demasiado en ningún apartado.
- Lo mejor de la película:
Poder disfrutar de una película de coches distinta y apta para no amantes del tunning.
- Lo peor de la película:
Esos momentos tan oscuros en que casi tienes que intuir lo que pasa.