Este año hemos experimentado el cambio de la clásica Nit Golfa del Festival Nits de Cinema Oriental, que a partir de ahora pasará a llamarse CATIII, y nos damos cuenta de que en esta noche no sólo imperará tener una película extrema, sino que será más bien de aire erótico, además de incluir otras sorpresas que harán que la risa esté asegurada. En su primera entrega hemos visto una película llamada Big boobs sisters: the yellow panties of happiness, un pinku eiga japonés (película erótica) que la verdad es que personalmente nos ha dejado un poco parados, pero que en buena compañía puede llegar a ser toda una risa.

La película empieza con el retorno a casa de un preso que ya ha cumplido condena y que espera encontrar unas bragas amarillas colgadas en el balcón en señal de que su chica le ha esperado hasta ahora. En vez de eso se encuentra con que ahora los habitantes del piso son tres monjas que, en un principio no le reciben nada bien, pero luego lo acogen y esperan que se quede con ellas al no tener ningún sitio dónde ir; es así como el tipo se da cuenta de que realmente no son monjas, sino tres mujeres despechadas y fugadas de casa al no ser tratadas como debían por sus maridos, y que también regentan un bar nocturno en el que intentan solucionar los problemas de amor de la gente. Él se queda viviendo con ellas y protegiéndolas, pero al poco empiezan a verlo como el único hombre que tienen, entre eso y que no está del todo mal y que las cuida mucho, todas se lo quieren llevar a la cama. Al final se dedica a hablar con cada una de ellas para saber que les pasó y juntos resuelven los problemas amorosos de todas, no sin antes tener algunos buenos revolcones y sustos.

No nos extenderemos mucho con esta reseña ya que tampoco es una película que aporte nada en ningún nivel.

Lo primero que nos gustaría destacar es que no la busquéis pensando en ella como el típico pinku japonés, con jovencitas asiáticas de buen ver, alguna gracia para amenizar el tema y muchas escenas no de sexo, ni en las que se vea mucha carne, pero sí de rozamientos y poses sexys. Ésta más bien es una película casi de autor con algo de sexo para atraer a un público mayor, pero:

• Aquí no veréis jovencitas, sino más bien señoras mayores entradas en carnes; por una parte es de agradecer que alguien haga este tipo de películas con algo de realismo, pero no es eso lo que uno busca con este título
• Las escenas de sexo son dos o tres y ninguna de ellas es demasiado explícita ni demasiado sexy, más bien son señoras encima de señores y enseñando las piernas, y casi mejor porque cuando se desnuda casi del todo es aún peor
• La historia y casi todas las escenas son más bien serias y dramáticas, mostrando una cara triste y baja de la sociedad, con algo de optimismo, pero sin ninguna gracia en general

Y nos extraña bastante, no sólo la inclusión de una película así en este festival, sino también que su director sea Kato Yoshikazu, el director y creador de la famosa saga erótica de kunoichis formada por Twin blades of the ninja, Ninjaken: the naked sword, Ninja she-devil y I was a teenage ninja; vaya cambio artístico que ha pegado el hombre! De unas aclamadas cintas de ninjas sexuales a esto.

En definitiva, un producto más parecido a algunas de las escenas de Fellini (en cuanto a estilo, no profundidad, tampoco no nos vengamos arriba…) que a los típicos pinku eiga japoneses; no os dejéis engañar por el título!

• Lo mejor de la película:

Tomársela en cachondeo en un festival gamberro.

• Lo peor de la película:

Esas mujeres demasiado realistas.