Otra de las películas japonesas que vimos en el último Festival Nits de Cinema Oriental fue Hydra, una película algo más modesta de la que no habíamos ni oído hablar, así que pensamos que podría ser otra de esas gratas sorpresas que nos gustan tanto. Se trata de un thriller de esos algo más oscuros, metiéndose en tramas de yakuzas, etc.

El protagonista es cocinero en uno de esos pequeños bares de cualquier callejón de Tokyo, con clientela habitual cada noche y algún que otro problema, entre borrachos, hombres buscando compañía femenina, etc. Pues nuestro protagonista, aunque es muy callado y nunca se mete con nada ni nadie, siempre salva a las clientes de cualquier problema que puedan tener con los hombres, y en realidad es bastante respetado. Todo bien, un vida muy tranquila hasta que su pasado vuelve a él, y es que anteriormente había sido uno de los mejores asesinos de una organización secreta, y no sólo eso, sino que conoce muchos secretos que nadie debería conocer. En cierto momento, algún miembro de su antigua organización lo encuentra e intenta que vuelva a trabajar, eso unido a que otro grupo ha contratado a su propio asesino de élite para hacer la competencia y acabar con Hydra, harán que el pobre se meta en líos y acabe otra vez ligado a este mundo oscuro y lleno de sangre.

No nos extenderemos demasiado con la reseña, porque la película tampoco tiene demasiado, en general está bastante bien, pero es muy poco original, hemos vista ya muchas películas parecidas y con una dirección, nos actores, etc. mucho mejores que ésta.

Se trata de una de esas películas bastante oscuras, todas las escenas son nocturnas y, incluso siendo prácticamente toda en interiores (en exteriores hay básicamente planos generales de las calles de Tokyo y algunos actos en callejones, tejados, etc.), y sobre todo muy pausada, muy al estilo japonés en este aspecto, de esas que todo y ser una película de acción, todo transcurre pausadamente.

También nos han gustado algunas cosas de la película, sobretodo un aire muy ochentero sin el recurso fácil de recurrir a la música o referencias que todos tenemos en la cabeza, sólo por el aire que se respira en esos ambientes.

Las escenas de acción no están nada mal, cierto que después de ver a los grandes coreógrafos de Hong Kong o incluso a los japoneses, ésta se queda un poco a medias, pero por ser la producción independiente que es, nos ha sorprendido bastante. Y en verdad esta acción es al que representa la mayor parte de la película, quizás no en tiempo, pero sí en intensidad, y es lo que recordará la gente que la haya visto, poco más.

También la manera de narrar la historia, a través de sus personajes y de las conversaciones entre ellos, sin saber nada de lo que sucede al principio e ir descubriendo de qué se trata en cada encuentro; aunque esto también lo habíamos visto algunas otras veces, ya.

Finalmente, su protagonista, interpretado por Masanori mimoto (Alien vs ninja, Ninja hunter) no es que sea un actorazo, pero la verdad es que se curra bastante la acción, gracias a él la película gana algo de calidad.

En definitiva, una película que no os aportará nada como aficionados al cine que sois, pero que por lo independiente que es, no está nada mal; poco original pero bien trabajada, perfecta como ópera prima de su director para empezar a labrarse un nombre.

• Lo mejor de la película:

Algunos malotes bastante molones.

• Lo peor de la película:

Los actores secundarios dan bastante pena.