Otra de las películas chinas de este año que hemos podido ver en el reciente Festival Nits de Cinema Oriental ha sido Eye for an eye (Defiant), que mucho podréis pensar que se trata de otro telefilme de plataforma televisiva, pero que en realidad llegó a tener estreno en cines y todo, y la verdad es que se nota una producción cuidada y no de esas con ánimos de ahorrar por dónde se pueda. La definían como la versión china moderna de Zatoichi, y la verdad es que sí que guarda bastantes parecidos, incluso por ser china, es muy parecida a un chambara japonés.
El protagonista es un ciego al que le gusta el juego y la bebida, pero siempre con moderación y controlando perfectamente todo lo que hace; aunque sea ciego, nadie se mete con él, es un tipo peligroso cuando quiere y un buen luchador. En uno de sus viajes, traba amistad con una tabernera que produce su propio vino (excelente) y que está a punto de casarse, por le que acaba invitando a nuestro héroe a la boda para que pueda beber tranquilamente; de hecho, casi todo el pueblo está invitado, es una chica muy popular. Una boda genial hasta que llega su hermano, un rudo guerrero ambulante que tiene algunos problemas con mucha gente; por su culpa, toda la boda se va al garete y acaba en un auténtico desastre; el héroe ciego intenta no involucrarse, ya que ni siquiera es de ese pueblo, pero debido a la amistad que ha hecho con la tabernera y al no poder ver esa injusticia, acaba desenfundando su katana y luchando por el bien contra todo un ejército de malvados.
Cuando ya pensábamos que nos íbamos acostumbrando al nuevo cine de acción chino, en el que hay básicamente dos vertientes, que son las de las películas fantásticas (casi siempre xianxias) plagadas de efectos especiales en el que lo más importante es el efecto visual, y otra de películas más de artes marciales, en las que la historia suele ser bastante clásica y el resto tampoco importa demasiado siempre que la acción y las peleas sean animadas… Aparece una película cómo ésta, que tiene un plus, diríamos que de calidad o de originalidad, aplicando un estilo en el que la historia sigue siendo algo tradicional y poco original, el punto fuerte es la acción (en este caso combates a katana), pero se ha buscado hacer la película algo mejor que el resto, intentando darle un estilo propio y buscando un poco la mejoría en los pequeños detalles de localizaciones, vestuarios, uso de extras, etc.
Toda la película, aunque acabe siendo un de acción al uso, tiene un toque bastante oscuro, y no nos referimos a escenas nocturnas, sino a buscar una introspección en el personaje y sus sentimientos más allá de la simple historia y el plasmar esos sentimientos y esa incapacidad de visión en un poco de oscuridad que se reflejará en escenarios, luces, fotografía, etc. también en diálogos más o menos serios, la falta del típico personaje cómico… para que el espectador lo pueda ver claramente (ahora tampoco penséis que se trata de una película de autor, son pequeñas diferencias con el cine de acción convencional).
La película tiene también muchas referencias visuales no sólo a la saga Zatoichi, sino al género chambara en general, cualquier fan del género verá muchas imágenes o secuencias que le recordarán a los clásicos de este tipo de cine, quizás no tanto a películas concretos, pero sí a conceptos visuales mil veces utilizados.
Con un ritmo creciente, pero en general bastante pausado, con sus buenas escenas de acción cuando son necesarias y con un nivel bastante alto en cuanto a artes marciales y luchas con katanas, y un estilo de dirección correcto (sin buscar llegar a lo más espectacular del mundo, sino buscando tan sólo contar una historia, ponerle la acción justa y necesaria y darle un poco de estilo personal).
El protagonista es Tse Miu (Demon hunter Nezha, Shaolin conquering demons), discípulo de Jet Li y muy correcto tanto en su dominio de las artes marciales, como en su nivel de actuación.
En definitiva, nos encontramos con una película de acción que podría ser más típica japonesa que de China, con una historia típica que nos recuerda a los chambaras clásicos y un estilo más moderno y personal, un tanto oscuro. Perfecta pata cualquier amante del cine de acción y katanas.
- Lo mejor de la película:
El haber sabido darle un plus para ser mejor que las típicas películas actuales de plataforma.
- Lo peor de la película:
Quizás la historia habría podido tener un poco más de jugo.