Otra de las pocas películas hechas en Hong Kong que ha dado un poco que hablar este año, nosotros la pudimos ver en el Festival de cine de Sitges y la verdad es que nos ha parecido bastante regular. Hand rolled cigarette es un thriller que intenta emular a las películas de género de los ‘80, cogiendo algunos elementos de Heroic Blodsheet, pero sin llegar a formar parte de ese subgénero. La verdad es que es bastante evocativa y tiene un estilo 100% Hong Kong (incluyendo un escenario casi durante toda la película en las Chunking Mansions, cosa que nos trae muy gratos recuerdos), sin influencias del cine o de la producción china, pero a veces eso no es lo más importante. 

Es la historia de un exsoldado que después de volver a Hong Kong y dejar el servicio, tiene algunos problemas económicos con sus compañeros de trinchera, con quien estaba muy apegado y que ahora pierde su confianza. Después de quedarse sin dinero, va haciendo algunos trapicheos con la mafia; actualmente relacionados con la venta de una partida de tortugas exóticas. A su vez, otro personaje del mundillo que trafica con droga para la misma mafia, se acaba haciendo con una bolsa llena de material sin cortar, y perseguido por los matones de la mafia que buscan esa bolsa que les pertenece. Mientras el traficante huye, por causalidad acaba escondido en casa del exmilitar (en las Chunking Mansions), a quien le promete una parte del botín si lo puede ocultar de la mafia durante unos días. Al principio es solo un acuerdo comercial, pero poco a poco se irá creando una relación entre los dos mucho más profunda, lo que los llevará a enfrentarse juntos a esa mafia que los tiene a los dos cogidos por dónde no quieren. 

La película empieza perfectamente, con una escena anterior, con unos camaradas que se hacen mucho más que amigos durante la guerra, un inicio de historia muy prometedor e indicativo de una película de sentimientos a flor de piel, pero después esta subtrama se queda un poco colgada, sirviendo de excusa para alguna tontería, pero poco más. Toda la presentación de personajes y de la situación hasta que empieza la historia de verdad también está muy lograda, muy de thriller de Hong Kong de los ‘80 y presentando una historia con mucho potencial, pero la verdad es que en la parte central, se acaba deshinchando un poco, manteniendo la lógica, pero volviéndose bastante previsible y monótona, hasta un final lleno de acción y con una buena escena para concluir la historia. 

Con esto no estamos diciendo que sea una mala película o que sea aburrida, ni siquiera que tenga un mal ritmo; la verdad es que se disfruta bastante toda ella, el único problema es que para los que ya hemos visto otras películas más clásicas de este estilo, ésta tampoco nos aporta demasiado, convirtiéndose en una de muchas, sin nada inesperado o que le de ese punto que la hace distinta a las demás.  

A parte de eso, pues también debemos decir que tiene buenas dosis de suspense e incluso de acción, es bastante animada y con sus toques de dramatismo también, sobre todo reflejando una amplia gama de sentimientos humanos por las distintas relaciones entre sus personajes (y no sólo los protagonistas, aquí hay muchos secundarios de gran importancia). Con una narración más que correcta, unos actores de buen calibre y una cinematografía excelente. 

Lo que más nos ha impresionado ha sido que se haya podido ubicar casi toda la historia en las Chunking Mansions, un escenario emblemático de Hong Kong y de muchas películas míticas, que además tiene la gracia de hacer una historia completa en un escenario cerrado como este. 

En definitiva, un thriller con una buena historia, emotiva y llena de acción también; una buena película que seguro que os gusta, pero que tampoco pasará a la historia por no saber diferenciarse de sus referentes, ni actualizarse, ni buscar ese punto distintivo. 

• Lo mejor de la película: 

Una buena historia, en un gran escenario y con unos buenos actores. 

• Lo peor de la película: 

Algunas subtramas que se quedan colgadas.