Una de las películas que más nos ha gustado del reciente Festival de Cinema de Sitges (por no decir la que más) ha sido sin duda The wild goose lake, una de esas maravillas de cine negro chino de las cuales hemos visto algunos ejemplos recientemente, aunque no tantos como nos gustaría; esas películas oscuras, crudas y con una realización impecable que nos hacen deleitarnos con el cine bien hecho. La que nos ocupa ya ha pasado por bastantes festivales con muy buena aceptación, aunque personalmente no esperamos que se convierta en un exitazo (a poca gente le interesa este tipo de películas).

La historia trata sobre un mafioso recién salido de la cárcel que, por circunstancias inesperadas se vuelve a meter en líos de los gordos, y es que uno de sus hombres mata a otro jefe mafioso y, claro, es él el que tiene que asumir las consecuencias. Entre una gran confusión, un momento de lluvia intensa y de persecuciones locas con scooters por la ciudad, también se verá implicado (sin ser culpable) en el asesinato de un policía, así que ya empezará a ser perseguido tanto por mafiosos como por policías e intentará esconderse en los recovecos más poco visitados de la ciudad; allí encontrará a una prostituta que accederá a ayudarle, con lo que en vez de salvarse, serán los dos los perseguidos a partir de entonces. Después de mucho huir, el mafioso acabará planteándose una rendición y al menos poder salvar a su ayudante y a su mujer, pero ni así le dejarán tranquilo.

Como ya os comentábamos se trata de un thriller muy sobrio y oscuro, de hecho sucede absolutamente de noche, en una ciudad del interior de China (una de esas poco transitadas y llena de escoria) más de la mitad de escenas en una lluvia intensa que acrecenta tanto el ambiente negativo, como la tensión en los momentos clave de la película; así que de momento tenemos una ambientación y unos escenarios insuperables para una historia de este tipo.

El director ya nos tenía acostumbrados a este tipo tanto de historias como de ambientación, con su último trabajo con el que ya nos fascinó, pero en este no se ha quedado corto e incluso ha añadido algunos elementos que creemos que lo han hecho mejorar bastante.

Y es que el ritmo ha cambiado bastante comparando esta película con Black coal, thin ice, con la que el director saltó a la fama; aquí ya no se toman las cosas tan relajadamente no hay ninguna de esas escenas contemplativas que nos ayudaban a apreciar los pequeños gestos y las maravillas de las localizaciones; tampoco diremos que sea una película de acción, pero sí que coge un ritmo algo más marcado, con un movimiento incesante y añadiendo algunas escenas de acción de verdad, más de persecuciones y escapatorias que de peleas o tiros, pero aportando un gran dinamismo al conjunto de la cinta. Mención a parte al guión de la película, no por tener giros inesperados ni nada de eso (en realidad es una historia bastante simple) sino por jugar tan bien con los flashbacks que muchas veces ni nos enteramos que hemos cambiado de época hasta que ya ha pasado un rato y nos lo hace ver algún pequeño detalle.

Con la fotografía tampoco se queda nada corto, más teniendo en cuenta la oscuridad total en la que se sumerge la historia y que la hace más interesante; aquí el director muestra una gran habilidad para jugar con distintos tonos de luz para resaltar lo que necesita en cada momento o para hacer que las cosas parezcan algo distintas a lo que nos podríamos imaginar; así como para intensificar el aspecto lúgubre de la ambientación y aún así que no pierda ningún toque de color importante.

Como ya os comentábamos, el director de la cinta es Diao Yinan (Black coal, Night train) para nosotros a partir de ahora ya es una garantía de cine de calidad, así que seguiremos su carrera muy de cerca, ya que nos ofrece siempre algo parecido, pero sin llegar a caer en una rutina.

En definitiva, se trata de un thriller oscuro, intimista y algo salvaje en algunos momentos, pero con una calidad cinematográfica excelente; no dudamos que le gustará a cualquier aficionado al cine de calidad.

• Lo mejor de la película:

La evolución que hemos visto desde el anterior trabajo del director.

• Lo peor de la película:

Nada malo a la vista, quizás algunos dirán que es muy lenta, pero nos ha parecido lo contario.